El gobierno de Malí dijo el lunes (24 de enero) que había pedido a Dinamarca que retirara inmediatamente las tropas desplegadas en la nación de África Occidental como parte de una fuerza especial antiterrorista dirigida por Francia, porque no se le consultó y el despliegue no siguió el protocolo.
«El gobierno de Malí observa con asombro el despliegue en su territorio de un contingente de fuerzas especiales danesas dentro de la fuerza Takuba», dijo el gobierno en un comunicado.
#Mali : el gobierno exige la salida del contingente danés de la operación de las fuerzas especiales europeas Takuba.
Près de 90 soldats danois étaient arrivés à Menaka, dans le nord-est, il y a une semaine. pic.twitter.com/Rubcbulh1Q
– Paul Lorgerie (@PLorger) 24 de enero de 2022
Dijo que el despliegue tuvo lugar sin su consentimiento y sin tener en cuenta el protocolo adicional aplicable a la fuerza de tareas, y añadió que Dinamarca debería retirar inmediatamente las tropas.
La declaración decía que todos los socios de la fuerza de tarea necesitaban un acuerdo previo con el gobierno antes de los despliegues en Malí.
La decisión se produce en medio de la tensión entre Malí y sus socios internacionales, incluidos los organismos regionales y la Unión Europea, que han sancionado a Malí después de que el gobierno de transición no organizara elecciones tras dos golpes militares.
Las tensiones han aumentado también por las acusaciones de que las autoridades de transición han desplegado en Malí a contratistas militares privados del Grupo Wagner, respaldado por Rusia, lo que algunos países de la UE han considerado incompatible con su misión.
Un comunicado en la página web del Ministerio de Defensa danés decía el lunes que se habían desplegado unos 90 efectivos, entre ellos cirujanos y las fuerzas especiales del ejército danés, de apoyo logístico. Su mandato debía durar hasta principios de 2023, decía.
La Fuerza de Tarea Takuba se estableció como un sucesor parcial de una operación antiterrorista francesa en la región del Sahel de África Occidental que el presidente francés Emmanuel Macron ha comenzado a reducir de su fuerza inicial de 5.000 personas.
La fuerza especial está compuesta por unos 14 países europeos, que proporcionan fuerzas especiales y apoyo logístico y táctico para trabajar junto a las tropas regionales en operaciones específicas contra militantes islamistas.
Se espera que las fuerzas ayuden a Malí y a los vecinos del Sahel de África Occidental, Burkina Faso y Níger, a hacer frente a los militantes yihadistas vinculados al Estado Islámico y a Al Qaeda que han ocupado franjas de territorio en la zona trifronteriza de los países.
«El objetivo es estabilizar Malí y partes de la zona tripartita de Liptako-Gourma, que abarca localidades de Malí, Níger y Burkina Faso, y garantizar la protección de los civiles contra los grupos terroristas», señala el comunicado danés.
