El cuarto paquete de sanciones de la UE, que entrará en vigor el martes (15 de marzo), se dirige a más oligarcas, prohíbe la venta de productos de lujo a Moscú y afecta a varias empresas de defensa.
Los embajadores de la UE acordaron el lunes (14 de marzo) el cuarto paquete de sanciones tras la invasión rusa de Ucrania hace tres semanas. Las sanciones entrarán formalmente en vigor cuando se publiquen en el diario oficial de la UE a última hora del martes.
Las sanciones incluirán la prohibición de importar acero y hierro rusos y la prohibición de que las empresas de la UE participen en nuevas inversiones en compañías petroleras y en el sector energético, según el borrador de la nota.
También incluirán la prohibición de exportar productos de lujo por valor de más de 300 euros, incluida la prohibición de exportar coches, barcos y aviones de lujo por valor de más de 50.000 euros, que se aplica a los modelos de varias marcas de coches europeas, como Audi, BMW, Mercedes, Ferrari y Porsche.
La presidencia francesa del Consejo de la UE dijo que también se revocaría el estatus de «nación más favorecida» de Rusia en la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Además de ser una medida simbólica, esto podría abrir la puerta a nuevas restricciones mediante derechos de aduana y cuotas de importación.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, declaró que la UE estaba trabajando para suspender los derechos de Rusia como miembro de las principales instituciones multilaterales, incluidos el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
Esto permitiría al bloque prohibir o imponer aranceles punitivos a los productos rusos, de forma similar a lo que se hace con Corea del Norte o Irán.
El paquete también añadirá al propietario del club de fútbol Chelsea, Roman Abramovich, y a otras 14 personas a la lista de multimillonarios rusos sancionados por la UE, según dijeron diplomáticos a primera hora del día.
Ya la semana pasada, Abramovich fue objeto de sanciones en el Reino Unido, al igual que el industrial ruso Oleg Deripaska, que actualmente no figura en la lista de la UE.
Varias figuras de los medios de comunicación rusos controlados por el Estado también van a estar en la nueva lista de sanciones de la UE.
Además, se añadirán nueve empresas, principalmente activas en los sectores de defensa y militar.
Rosoboroneksport, el único intermediario estatal ruso en el comercio de armas, bienes y tecnologías de «doble uso» (civil y militar), que en las dos últimas décadas ha vendido armas al extranjero por valor de 180.000 millones de dólares, también va a figurar en la lista. Otro es el constructor naval Zelenodolsk Shipyar.
Huesos de la discordia
Sin embargo, los Estados miembros del Este de la UE han subrayado que el paquete de sanciones no va lo suficientemente lejos.
La principal manzana de la discordia es un posible embargo de petróleo o gas, que ahora sólo reclama con fuerza Polonia junto a un pequeño grupo de otros Estados miembros de la UE.
Uno de los principales problemas del paquete ahora acordado era la rapidez y la dureza con la que se procedería a imponer nuevas sanciones.
«Las ambiciones de nuestro gobierno eran mayores que lo que finalmente se acordó», dijo el embajador de Polonia ante la UE, Andrzej Sadoś, a los periodistas tras la reunión.
«Cada día está más claro que se están formando tres bandos: Polonia y los Estados bálticos por un lado, que quieren más sanciones y más fuertes», dijo un diplomático de Europa Occidental.
Por otro lado, Alemania, Italia, Hungría y Bulgaria -el bando más «conservador», que prioriza sus propios intereses económicos- y el resto», añadió el diplomático.
El bando conservador exigió con éxito la relajación de varias sanciones sobre las transacciones con empresas estatales, y quería excepciones para el aluminio, el cobre, el paladio y el mineral de hierro, además de evitar las sanciones en el sector energético, dijeron fuentes de la UE.
«Así que está claro que los resultados de hoy fueron recibidos con alegría por los conservadores -que consiguieron la mayor parte de lo anterior- porque sus intereses económicos quedaron protegidos», dijo otro diplomático de la UE.
