La primera coronación de Gran Bretaña en 70 años tiene lugar el sábado (6 de mayo), con Carlos III coronado rey en una elaborada ceremonia cristiana impregnada de solemne ritual y más de un milenio de historia.
La coronación, la primera de un rey británico desde 1937, es la confirmación religiosa de su acceso al trono tras la muerte de su madre, la reina Isabel II, el pasado mes de septiembre.
Gran parte del servicio anglicano en la abadía londinense de Westminster -que también coronará como reina a Camilla, la segunda esposa de Carlos- sería reconocible para los antepasados del rey de 74 años hace 1.000 años.
Pero también habrá un claro cambio con la participación de mujeres obispos, líderes religiosos minoritarios y una lista de invitados más diversa y representativa de la sociedad británica que los lores y damas de antaño.
También lo es el tema medioambiental de la ceremonia, que incluye aceite vegano para la unción y trajes ceremoniales reciclados, reflejo de la defensa que Carlos ha hecho durante toda su vida de la sostenibilidad y la biodiversidad.
El organizador de la coronación, el Conde Mariscal, Duque de Norfolk Edward Fitzalan-Howard, calificó el evento como «un momento de orgullo» en la historia británica.
«Durante la coronación, el rey jurará ante Dios y la nación servir a nuestro país como jefe de Estado, defendiendo nuestras leyes y manteniendo la justicia para todos», dijo a los periodistas esta semana.
Oposición
El duque, cuya familia lleva organizando actos de Estado desde 1483, dijo que la coronación era también una oportunidad para unir a Gran Bretaña y a la agrupación de 56 naciones de la Commonwealth, que Carlos también preside.
Sin embargo, no todo el mundo está de humor para celebrar. Los opositores republicanos que quieren un jefe de Estado elegido tienen previsto protestar ese día con pancartas que dicen «No es mi rey».
También los más jóvenes dicen que la coronación – y la monarquía en general – les deja fríos, según los sondeos.
Más allá, la posición de Carlos parece cada vez más endeble como monarca hereditario en 14 países de la Commonwealth fuera del Reino Unido.
Jamaica podría celebrar un referéndum sobre la ruptura de los lazos con la monarquía ya el próximo año, según Marlene Malahoo Forte, ministra de Asuntos Jurídicos y Constitucionales del país caribeño.
«Jamaica en manos jamaicanas», declaró a Sky News. «¡Hora de decir adiós!»
Australia estudia un cambio constitucional para dar a los indígenas, antaño oprimidos por la corona británica, una mayor «voz» institucional en la formulación de políticas, lo que podría presagiar una futura separación.
Carlos también se enfrenta a peticiones para que se disculpe por la participación de sus antepasados en el colonialismo y la trata de esclavos.
Y Sudáfrica ha pedido la devolución del diamante más grande del mundo, que fue desenterrado bajo el dominio británico y ahora forma parte de las joyas de la corona que se utilizarán en la abadía el sábado.
Coste
De vuelta a casa, los líderes políticos servicio en la abadía.
En el palacio, recibirán el saludo de los miembros de las fuerzas armadas y, a continuación, asistirán a un desfile aéreo ceremonial desde el balcón con otros miembros de la familia real.
