Los candidatos presidenciales franceses están divididos sobre la concesión de la autonomía a Córcega

El Estado francés está a favor de «llegar hasta la autonomía» de Córcega, declaró el miércoles (16 de marzo) el ministro del Interior, Gérald Darmanin. La mayoría de los candidatos a la presidencia, salvo los de la extrema derecha, se declararon a favor de la medida. EURACTIV Francia informa.

Córcega se ha visto afectada por violentas protestas en las últimas dos semanas, ya que los manifestantes exigen una mayor autonomía de Córcega en relación con la Francia continental y el traslado de los presos corsos del continente a la isla.

Las protestas fueron provocadas por la noticia de una agresión en prisión a Yvan Colonna, un hombre que fue detenido en 1998 por el asesinato del prefecto de Ajaccio, Claude Érignac, en un momento en el que las tensiones entre los independentistas corsos y las autoridades estatales eran elevadas.

Los enfrentamientos con la policía han sido hasta ahora brutales. El 13 de marzo, en Bastia, más de 100 personas, entre ellas policías, resultaron heridas durante una protesta.

Con la esperanza de calmar la violencia, Darmanin declaró al diario regional Corse Matin, en una entrevista publicada el miércoles, que el diálogo entre las autoridades regionales y estatales era posible y que podría conducir a la concesión de la autonomía de Córcega. Sin embargo, una de las condiciones necesarias sería la «vuelta a la calma», añadió.

La concesión de la autonomía a Córcega supondría ampliar las competencias y los poderes del ejecutivo regional, reduciendo el control del Estado sobre la isla sin que Córcega se separe de Francia, a semejanza del modelo aplicado a algunas colectividades de ultramar.

Los candidatos a la presidencia sobre la autonomía de Córcega

El debate no es nuevo en Francia, como ya han señalado algunos de los candidatos presidenciales en liza. Sacar el tema y utilizar el término «autonomía» a menos de un mes de la primera vuelta electoral del 10 de abril se considera incluso una maniobra electoral. La candidata socialista Anne Hidalgo llegó a calificar la medida de «irresponsable», a pesar de ser partidaria de dar más competencias al ejecutivo corso.

El candidato de Los Verdes, Yannick Jadot, criticó el retraso de este anuncio, juzgando que «debería haberse hecho desde el inicio» del mandato del presidente francés Emmanuel Macron. «La autonomía plena» es la única para encontrar una «relación pacífica entre el Estado francés, Francia y Córcega», añadió.

El candidato de la izquierda radical, Jean-Luc Mélenchon, dijo en diciembre que estaba a favor de una autonomía basada en el modelo de la Polinesia Francesa «si [Corsica] lo pide» por las reivindicaciones de sus habitantes y el carácter insular del territorio.

Por su parte, la candidata de la derecha, Valérie Pécresse, ha acusado al gobierno de reaccionar de forma precipitada y de estar «dispuesto a ceder» a la violencia. Pécresse también advirtió del riesgo de «desmantelar» el marco republicano. Aboga por la autonomía de la isla acompañada de «indicadores de rendimiento» que garanticen también una mejor calidad de los servicios prestados a los corsos.

A diferencia de otros candidatos, los del bloque nacional-soberanista han condenado la propuesta gubernamental. El candidato de extrema derecha Éric Zemmour ha calificado la propuesta de «electoralista» y ha dicho que «la identidad corsa […] es compatible con el orgullo francés» y que él «restablecería el orgullo de la identidad en todas partes».

Julien Odoul, portavoz de la candidata ultraderechista Marine Le Pen, de Rassemblement National, dijo a EURACTIV Francia que Macron quiere «liquidar a Francia», que según él es «una e indivisible».

Odoul también criticó al presidente saliente por «negociar con los nacionalistas corsos», en referencia a las negociaciones en curso entre Macron y el ejecutivo corso con vistas a obtener apoyos antes de la segunda vuelta electoral, como reveló recientemente el semanario Canard enchaîné. «Cínico clientelismo», según Le Pen.

Entrevistado por France Info el miércoles por la mañana, el presidente del consejo ejecutivo de Córcega, Gilles Simeoni, recordó el casi 70% de los electores corsos que votaron «a favor de una lista nacionalista» en las últimas elecciones territoriales. Quiere que Córcega tenga un estatus en el que las competencias regias sigan en manos del Estado, pero que «en un cierto número de sectores estratégicos, la competencia [be] se transfiera por derecho a la colectividad corsa».