Los anfitriones de la conferencia de Berlín sobre la reconstrucción y recuperación de Ucrania, celebrada esta semana, hablaron de la necesidad de un nuevo «Plan Marshall» y de su compromiso de apoyar a Ucrania. Pero si de algo sirvió la conferencia fue para dejar al descubierto la insuficiencia del liderazgo europeo.
Mientras que el canciller alemán, Olaf Scholz, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, utilizaron una fuerte dosis de patetismo en su artículo de opinión conjunto antes de la conferencia, también se aseguraron de señalar que no se trataba de una conferencia de donantes y que no cabía esperar nuevas promesas de financiación.
Por el contrario, se trataba simplemente de una conferencia de expertos para discutir la mejor manera de estructurar lo que probablemente será un esfuerzo masivo de reconstrucción en Ucrania.
Sin embargo, la mayoría de las opiniones de los expertos podrían resumirse en tres palabras: Dar. Dinero. Ahora.
«Hablar de reconstrucción no puede ser una excusa para ayudar menos ahora», dijo Ronja Ganster, del German Marshall Fund, a EURACTIV.
«Los atentados de los últimos días demostraron que algunas de las inversiones son necesarias ahora», subrayó.
En octubre, Rusia inició una nueva ronda de ataques contra las infraestructuras civiles de Ucrania, lo que provocó prolongados apagones y problemas de suministro de agua potable.
Según Tymofiy Mylovanov, director de la Escuela de Economía de Kiev, era necesario reconstruir urgentemente las infraestructuras energéticas y logísticas, las viviendas y las instalaciones de tratamiento de aguas.
Werner Hoyer, presidente del Banco Europeo de Inversiones (BEI), también dijo que «tenemos que actuar ahora», probablemente el estribillo más común en la conferencia.
Refiriéndose a la preocupación de que las infraestructuras reconstruidas puedan ser destruidas de nuevo, Hoyer dijo: «Sí, esto puede ocurrir. Pero una buena gestión del riesgo no significa no correr ningún riesgo».
La conferencia de Berlín tuvo lugar más de tres meses después de la última conferencia internacional sobre la reconstrucción de Ucrania en Lugano.
«En Lugano se habló mucho en abstracto y no se avanzó en nada», dijo Mylovanov a EURACTIV por videoconferencia desde Kiev, esperando que la conferencia de Berlín diera algún resultado concreto.
Sin embargo, al hablar con funcionarios y diplomáticos durante la conferencia, era difícil calibrar los progresos tangibles realizados en los esfuerzos de reconstrucción desde Lugano.
Por ello, los funcionarios del gobierno ucraniano imploraron a los participantes en Berlín que se necesitaba ayuda lo antes posible.
«No podemos esperar al final de la guerra; necesitamos ayuda ahora», dijo el ministro ucraniano de Comunidades y Territorios, Oleksii Chernyshov, mientras que el ministro de Finanzas, Serhiy Marchenko, advirtió de los riesgos de una inflación galopante si el presupuesto del gobierno ucraniano no recibía pronto suficiente ayuda internacional.
Aunque hace una semana, von der Leyen había anunciado que la Comisión propondría pronto un apoyo presupuestario adicional de 18.000 millones de euros para 2023, lo que proporcionaría cierta previsibilidad a las finanzas del gobierno ucraniano, la UE aún no ha podido acordar plenamente los 9.000 millones de euros de ayuda macrofinanciera que había anunciado en mayo. Por tanto, los 18.000 millones de euros están lejos de estar garantizados.
Al concluir la conferencia en Berlín, el canciller Scholz dijo: «Seguimos juntos apoyando a Ucrania, mientras sea necesario».
Al ritmo actual de apoyo de la UE, se necesitará mucho más tiempo del necesario.
El resumen
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Esté atento a…
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- El Comisario Nicolas Schmit recibe a Yuliia Svyrydenko, primera viceprimera ministra y ministra de economía de Ucrania.
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- La vicepresidenta de la Comisión, Vĕra Jourová, interviene por videoconferencia en la Conferencia de Seguridad de Belgrado.
- El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo celebra una reunión de política monetaria.
Las opiniones son del autor.
