Dinamarca reanuda la construcción del enlace de gas entre Noruega y Polonia

La construcción de la parte danesa de Baltic Pipe, que conectará Polonia con los yacimientos de gas noruegos, se reanuda tras un paréntesis de nueve meses, según informó el martes el operador de red danés Energinet.

El gasoducto está diseñado para reducir la dependencia de Polonia del gas ruso, pero su construcción se detuvo en mayo de 2021 por problemas medioambientales.

Energinet dijo que ahora había recibido un nuevo permiso medioambiental y que todavía espera que el gasoducto esté parcialmente operativo a partir del 1 de octubre de este año y que funcione a plena capacidad de hasta 10.000 millones de metros cúbicos a partir del 1 de enero de 2023. La suspensión ya ha retrasado la fecha de inicio en tres meses.

La invasión rusa de Ucrania ha provocado la preocupación de que el suministro de gas ruso a Europa pueda cortarse, lo que pone de manifiesto la necesidad de diversificar los suministros.

La construcción de dos partes del gasoducto está suspendida desde 2021 tras la anulación de un permiso medioambiental por parte de un comité de apelación público danés debido a la preocupación por el impacto del gasoducto en especies protegidas de ratones y murciélagos.

La rusa Gazprom suministra la mitad de los 20.000 millones de metros cúbicos de gas que consume Polonia, pero el contrato a largo plazo expira a finales de este año y Varsovia no tiene previsto renovarlo.

Polonia pretende sustituir estos suministros con envíos a través de Baltic Pipe.

El gasoducto que unirá a Polonia con una terminal de gas natural licuado en Lituania, denominado GIPL, se inaugurará el 1 de mayo, según anunció Lituania el 7 de marzo, antes del inicio previsto para mediados de 2022.

GIPL permitirá a Polonia aumentar las importaciones de GNL y enviar gas a los países bálticos para suavizar las posibles interrupciones.

El gasoducto, diseñado para tener una capacidad de envío de unos 2.400 millones de metros cúbicos de gas al año en ambas direcciones, fue financiado por la Unión Europea para ayudar a Polonia y a los países bálticos a aumentar la seguridad del suministro.