Xi de China reitera su oposición al uso de sanciones económicas

El presidente chino Xi Jinping reiteró la oposición de China a las sanciones unilaterales y a la «jurisdicción de armas largas» en un discurso pronunciado el jueves (21 de abril), sin mencionar directamente las acciones punitivas de Occidente contra Rusia por su invasión de Ucrania.

China ha criticado en repetidas ocasiones las sanciones occidentales, incluidas las impuestas a Rusia, pero también se ha cuidado de no proporcionar ayuda a Moscú que pudiera dar lugar a la imposición de sanciones a Pekín.

En un discurso por vídeo pronunciado en la reunión anual del Foro de Boao para Asia, en la isla meridional china de Hainan, Xi advirtió que la «desvinculación» económica y las tácticas de presión, como la ruptura de las cadenas de suministro, no funcionarían.

«China quiere presentar una iniciativa de seguridad global» que defienda «el principio de indivisibilidad de la seguridad», dijo Xi.

«Debemos defender el principio de indivisibilidad de la seguridad, construir una arquitectura de seguridad equilibrada, eficaz y sostenible, y oponernos a la construcción de la seguridad nacional sobre la base de la inseguridad en otros países.»

Rusia ha insistido en que los gobiernos occidentales respeten un acuerdo de 1999 basado en el principio de «indivisibilidad de la seguridad», según el cual ningún país puede reforzar su propia seguridad a expensas de otros.

China y Rusia se han acercado cada vez más, y China se ha negado a condenar la invasión rusa de Ucrania, que Moscú califica de «operación especial». China ha culpado de la crisis de Ucrania a la expansión de la OTAN hacia el este.

Xi afirmó que es necesario realizar esfuerzos para estabilizar las cadenas de suministro mundiales, pero también dijo que la economía china es resistente y que su tendencia a largo plazo no ha cambiado.

La economía china se enfrenta a vientos en contra por el impacto de sus agresivos esfuerzos para frenar la propagación del COVID-19, especialmente en su centro económico de Shanghai. Xi no mencionó la crisis del COVID de China durante el discurso.