Los sindicatos franceses se enfurecen por los recortes en la duración del seguro de desempleo

El ministro de Trabajo, Olivier Dussopt, ha declarado este lunes que la duración del seguro de desempleo se reducirá en un 25% a partir de febrero del año que viene, lo que ha provocado el enfado de los sindicatos franceses y de la izquierda política.

En una rueda de prensa celebrada el lunes en París, Dussopt presentó las nuevas normas que se aplicarán al seguro de desempleo en 2023 tras la aprobación definitiva de la ley de pleno empleo el 17 de noviembre.

La duración máxima de la indemnización se reducirá en un 25% con respecto al sistema actual. Por ejemplo, un trabajador que tenga derecho a recibir 24 meses de indemnización sólo recibirá 18 meses.

El sistema francés seguirá siendo «uno de los más generosos de Europa», dijo el ministro. Esto se aplica tanto a la duración del trabajo que da derecho a una indemnización como a las condiciones de la indemnización en relación con el tiempo cotizado.

Además, la reforma es necesaria, ya que el 60% de las empresas francesas tienen dificultades para contratar personal y un tercio de ellas no pueden hacer frente a su cartera de pedidos debido a la escasez de mano de obra, explicó el ministro.

Añadió que las nuevas normas de indemnización del seguro de desempleo pretenden así tener en cuenta la situación económica y el estado del mercado laboral. El objetivo es conseguir «entre 100.000 y 150.000 retornos al empleo» en 2023.

No obstante, se prevén mecanismos de protección: si la situación económica se deteriora al final de la indemnización, el demandante de empleo tendrá derecho a un «complemento de fin de derecho», que prolongará la duración de la indemnización.

El nuevo sistema no se aplicará a los departamentos de ultramar ni a los «marineros, pescadores, estibadores, trabajadores del espectáculo [nor to] expatriados».

En caso de una situación considerada «desfavorable» para el mercado laboral y la economía en general, se suspenderá la reducción del 25% de la duración de la indemnización, que volverá a su curso actual.

El contexto económico será desfavorable si el desempleo supera el 9% o aumenta más de 0,8 puntos porcentuales en un trimestre. Actualmente, el desempleo en Francia se sitúa en torno al 7,3%.

Los sindicatos de trabajadores y los políticos de izquierdas han expresado su preocupación -incluso su enfado- por las nuevas normas establecidas por el ministro.

La CFDT, por ejemplo, aunque se considera un sindicato reformista, está preocupada porque «modular el seguro de desempleo en función de la situación económica no es una solución para conseguir el pleno empleo».

Según el sindicato, el Gobierno debería abordar más bien el «déficit de cualificación» y las «condiciones de trabajo ofrecidas» por las empresas francesas.

Preocupados por la escasez de mano de obra en ciertos sectores de la economía, los distintos sindicatos patronales se declararon satisfechos con los anuncios del ministro, aunque, según Michel Picon, vicepresidente de la Unión de Empresas Locales, citado por Le Monde, «la reforma sólo aporta una respuesta parcial a los problemas de contratación».

(Davide Basso EURACTIV.fr)