Los ministros de Agricultura de la UE renuevan el impulso a las técnicas genéticas para potenciar el sector

Los ministros de Agricultura de la UE están presionando a la Comisión Europea para que flexibilice las normas sobre nuevas técnicas genómicas (NGT), argumentando que es necesario para reforzar el sector ante el aumento de las sequías, el cambio climático y las pérdidas de rendimiento.

«Sólo tenemos que modificar nuestro antiguo marco legislativo que regula las técnicas modernas de cultivo», dijo el ministro checo de Agricultura, Zdenek Nekula, durante una rueda de prensa posterior a una reunión informal de ministros de Agricultura de la UE celebrada el viernes (16 de septiembre).

El término nuevas técnicas genómicas (NGT) -o nuevas técnicas de fitomejoramiento (NBT)- describe una serie de métodos científicos utilizados para alterar los genomas con el objetivo de modificar genéticamente ciertos rasgos en las plantas, como la tolerancia a la sequía.

Según la sentencia del Tribunal de la UE de 2018, los organismos obtenidos mediante nuevas técnicas de cultivo de plantas se clasifican como organismos modificados genéticamente (OMG), lo que significa que, en principio, entran en el ámbito de aplicación de la Directiva sobre OMG de la UE.

Según Nekula, este marco es una «limitación» para los agricultores europeos que provoca una «fuga de cerebros a países fuera de la UE», lo que conlleva importantes perjuicios.

Citando la preocupación de que la falta de fertilizantes, combinada con el aumento de los precios de la energía y el cambio climático, podría suponer un descenso drástico de la producción agrícola en la UE, el ministro checo dijo que se podría ayudar a los agricultores de la UE «utilizando la innovación y los resultados de la investigación en agricultura, subrayando que la pérdida de rendimiento de los cultivos clave es un «riesgo que no podemos subestimar».

«Tenemos que apoyar [new genomic techniques] NGT y crear nuevas variedades», dijo, añadiendo que esto «garantizará que la UE y el mundo puedan funcionar en un contexto más complejo, todo ello manteniendo [the EU’s] la competitividad».

Una fuente de la reunión dijo a EURACTIV que otros ministros de agricultura también expresaron su apoyo a la tecnología, incluidos los de Suecia, Lituania, Países Bajos, Malta, Irlanda, Italia, Hungría, Rumanía y Bélgica.

No es la primera vez que varios Estados miembros expresan su apoyo a la flexibilización de las normas de la UE sobre organismos modificados genéticamente, ya que los Países Bajos y Estonia lideraron una coalición de 14 Estados miembros de la UE que pedían esta medida en 2019.

Sin embargo, otros adoptaron un enfoque más cauteloso. Por ejemplo, el ministro de Agricultura alemán, Cem Özdemir, sugirió que aunque esta tecnología tenía potencial, no resolvería las preocupaciones a corto plazo, mientras que el ministro chipriota advirtió que los NGT no deberían socavar otros posibles enfoques sostenibles, como la agricultura de carbono.

Pero para la asociación de agricultores de la UE COPA-COGECA, el cambio no podía llegar lo suficientemente rápido.

«Necesitamos soluciones rápidas para las nuevas técnicas genéticas», dijo Christiane Lambert, presidenta del COPA, a los ministros durante la reunión, añadiendo que «acogía con gran satisfacción los ambiciosos mensajes que se han hecho» y presionando para» una nueva aprobación rápida de las sustancias de bajo riesgo.»

«En todos los temas, los agricultores seguirán siendo socios constructivos para garantizar la seguridad alimentaria y la neutralidad climática», añadió.

Sin embargo, los grupos de campañas ecologistas siguen siendo muy críticos con la tecnología, advirtiendo de su posible impacto en la salud y el medio ambiente, así como de la concentración de poder en sólo un puñado de actores de la industria.

La Comisión procede con cautela

Tras el resultado de un estudio de la Comisión de 2021, que concluyó que el actual marco jurídico que regula la edición de genes es insuficiente, el ejecutivo de la UE está revisando actualmente las normas comunitarias sobre la tecnología.

Se espera la presentación de una propuesta legislativa en el segundo trimestre de 2023.

Por su parte, el comisario de Agricultura de la UE, Janusz Wojciechowski, se abstuvo de ofrecer su apoyo a esta medida, pero dijo que es «necesario considerar este tema» prometiendo que se hará en la propuesta del próximo año.

Sin embargo, aunque subrayó la necesidad de continuar con el proceso para que la agricultura de la UE sea más sostenible y resistente, indicó que la Comisión procederá con cautela.

«La genómica ofrece oportunidades, pero todo debe basarse en pruebas científicas y análisis sólidos y en el respeto de la salud pública, el medio ambiente y el interés económico de nuestros agricultores», advirtió.