El miércoles (19 de octubre), los fiscales estadounidenses acusaron a cinco ciudadanos rusos de evasión de sanciones y otras violaciones relacionadas con el envío de tecnologías militares compradas a fabricantes estadounidenses a compradores rusos, algunas de las cuales acabaron en el campo de batalla de Ucrania.
Los fiscales federales de Brooklyn dijeron que los componentes electrónicos adquiridos por los ciudadanos rusos Yury Orekhov y Svetlana Kuzurgasheva incluían semiconductores, radares y satélites. Algunos de los componentes electrónicos obtenidos a través del esquema se han encontrado en plataformas de armas rusas incautadas en Ucrania, dijeron los fiscales.
Utilizaron una empresa alemana para enviar las tecnologías militares, así como el petróleo venezolano, a los compradores rusos, dijeron los fiscales.
Orekhov fue detenido en Alemania el lunes. Otro ruso acusado en el caso, Artem Uss, ha sido detenido en Italia. Estados Unidos está solicitando su extradición, según los fiscales. Reuters no pudo contactar inmediatamente con ninguno de los acusados para que hicieran comentarios.
«Seguiremos investigando, desbaratando y persiguiendo a quienes alimentan la brutal guerra de Rusia en Ucrania, evaden las sanciones y perpetúan la sombría economía del lavado de dinero transnacional», dijo en un comunicado Breon Peace, el principal fiscal federal de Brooklyn.
También el miércoles, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a Orekhov y a dos empresas que controla, Nord-Deutsche Industrieanlagenbau GmbH, también conocida como NDA, y Opus Energy Trading LLC. El Tesoro describió a Orekhov como un agente de compras y dijo que algunos de los envíos de tecnologías militares y sensibles de doble uso a usuarios rusos violaban los controles de exportación estadounidenses.
Las tecnologías de origen estadounidense pueden utilizarse en aviones de combate, sistemas de misiles balísticos e hipersónicos, municiones inteligentes y otras aplicaciones militares, dijo el Tesoro.
Las acusaciones y las sanciones se producen en un momento en que Washington está tratando de ampliar las sanciones a Rusia y tomar medidas enérgicas contra la evasión para presionar al Kremlin para que detenga su invasión de Ucrania.
En una reunión por primera vez la semana pasada con funcionarios de 32 países y de Estados Unidos, Washington advirtió que puede imponer sanciones a personas, países y empresas que suministren municiones a Rusia o apoyen su complejo militar-industrial.
«Sabemos que estos esfuerzos están teniendo un efecto directo en el campo de batalla, ya que la desesperación de Rusia les ha llevado a recurrir a proveedores inferiores y a equipos obsoletos», dijo el subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo, en un comunicado.
Los fiscales dijeron que Orekhov y Uss son dueños de NDA y la utilizaron como fachada para comprar las tecnologías y enviarlas a usuarios finales rusos, incluyendo las empresas sancionadas controladas por Timofey Telegin y Sergey Tulyakov, dos de los otros ciudadanos rusos acusados el miércoles.
Los acusados utilizaron empresas falsas y presentaron información falsa a los bancos estadounidenses, que procesaron transacciones por valor de decenas de millones de dólares en violación de las sanciones, dijeron los fiscales. Los acusados también utilizaron criptodivisas para las transacciones y para blanquear las ganancias, dijeron los fiscales.
Por otra parte, el miércoles, los fiscales federales de Connecticut acusaron a tres personas de violar los controles de exportación de Estados Unidos al tratar de enviar a Rusia una máquina de molienda controlada por ordenador conocida como «moledora de plantilla», que puede ser utilizada en programas de proliferación nuclear y de defensa.
Los individuos -todos ellos ciudadanos de Letonia o Ucrania- han sido detenidos por las autoridades letonas o estonias a petición de Estados Unidos, según los fiscales.
Petróleo venezolano
Orekhov y Uss también utilizaron NDA para enviar millones de barriles de petróleo de Venezuela a compradores en Rusia y China, trabajando con otros dos acusados, Juan Fernando Serrano y Juan Carlos Soto, para intermediar en los acuerdos con la petrolera estatal venezolana PDVSA, sobre la que Estados Unidos puso sanciones en 2019.
Según la acusación desvelada el miércoles, Orekhov y Uss compraron «repetidamente» petróleo a PDVSA y lo suministraron a una empresa rusa de aluminio que cotiza en bolsa y está controlada por un multimillonario e industrial ruso.
Sin nombrar a la compañía, la acusación dijo que había estado bajo sanciones de Estados Unidos desde el 6 de abril de 2018 hasta el 27 de enero de 2019, lo que coincide con las fechas en que la empresa rusa de aluminio Rusal fue sancionada. Rusal fue fundada por el multimillonario ruso Oleg Deripaska, que a su vez se enfrenta a cargos estadounidenses por violar las sanciones.
Rusal no respondió a una solicitud de comentarios fuera del horario de trabajo en Moscú. Un abogado de Deripaska no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
Ni PDVSA ni el Ministerio de Información de Venezuela respondieron inmediatamente a las solicitudes decomentario.
Después de la ronda inicial de sanciones de Estados Unidos a PDVSA, la rusa Rosneft surgió como un intermediario clave para el crudo venezolano. Después de que Washington sancionara a las filiales de Rosneft por sus tratos con PDVSA, docenas de empresas sin historial de comercio de petróleo han estado intermediando en las ventas de petróleo venezolano a compradores chinos.
Una investigación de Reuters encontró que muchas de ellas estaban registradas como páginas web en Rusia.
