El Primer Ministro sueco, Ulf Kristersson, advirtió el miércoles (11 de enero) a sus compatriotas de que no caigan presa de la propaganda de Moscú, después de que los medios de comunicación rusos difundieran la falsa noticia de que su país planeaba permitir que la OTAN desplegara armas nucleares en su suelo en tiempos de paz.
Kristersson pronunció este mensaje al informar a un grupo de más de 60 periodistas con sede en Bruselas que acudieron a Suecia en un viaje de prensa con motivo del inicio de la Presidencia sueca del Consejo de la UE, de seis meses de duración.
Kristersson, que asumió el cargo el pasado octubre, lidera el conservador Partido Moderado, afiliado al Partido Popular Europeo. A pesar de estar en una coalición difícil que incluye a los populistas Demócratas Suecos, de derechas, dijo que seguía una línea proeuropea.
El domingo, Kristersson declaró en el Folk, una conferencia anual sobre defensa nacional, que no estaba sobre la mesa la posibilidad de emplazar armas nucleares en suelo sueco en tiempos de paz.
Pero varios medios rusos informaron erróneamente de que había dicho lo contrario, es decir, que Estocolmo permitiría las armas nucleares en tiempos de paz.
Como dijo a EURACTIV un participante de alto nivel de Suecia que pidió no ser citado, las informaciones de los medios rusos habían sido amplificadas a través de las redes sociales, incluso por «ciudadanos muy decentes».
Kristersson dijo que su mensaje a «sus compatriotas suecos es que sean muy cautelosos y eviten difundir información falsa en las redes sociales».
La izquierda sueca se ha opuesto históricamente a entrar en la OTAN. Pero cuando la guerra en Ucrania hizo popular la adhesión a la alianza, los socialdemócratas suecos cambiaron de táctica, alienando a muchos de sus partidarios y exponiendo profundas divisiones entre la izquierda en el proceso.
Como explicó el orador de alto nivel, sin el fuerte impulso de la vecina Finlandia para entrar en la OTAN, el cambio de rumbo en Suecia habría sido imposible.
Por lo tanto, es probable que Rusia tenga como objetivo erosionar el apoyo a la adhesión a la OTAN de los dos países escandinavos en un momento en que tanto Turquía como Hungría siguen reteniendo las ratificaciones de sus candidaturas de adhesión.
Preguntado por las obstrucciones de Tukey, Kristersson negó los informes anteriores de que había dicho que Turquía estaba pidiendo «demasiado» a Suecia a cambio de la ratificación.
Los contactos con Türkiye, dijo, utilizando el nombre que Ankara está promoviendo para uso internacional, iban «muy bien».
«Estamos demostrando a Türkiye que estamos haciendo exactamente lo que dijimos que haríamos», dijo, admitiendo sin embargo que Ankara «a veces nombra a personas» que querían que fueran extraditadas.
«La legislación sueca es muy clara: sólo los tribunales pueden decidir», dijo el primer ministro.
Preguntado por la guerra en Ucrania y el apoyo sueco, Kristerssonr dijo que había hablado dos días antes con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, y que le había confirmado que «queremos hacer más».
Preguntado concretamente por el tipo de material militar que se iba a entregar, se negó a revelar tales detalles, pero añadió que los suministros se estaban «coordinando con los socios».
La ministra sueca de Asuntos Europeos, Jessika Roswall, también respondió a las preguntas de la prensa. Preguntada por si el retraso en la ratificación de la candidatura sueca a la OTAN era algún tipo de chantaje, dado que Hungría está sometida a un procedimiento del Artículo 7 y corre el riesgo de perder considerables fondos de la UE, argumentó con rotundidad que los dos procesos iban «en paralelo».
Los contactos con Budapest están progresando, dijo, y la Presidencia sueca espera ver «el efecto» de estos avances.
Preguntada por cómo iba a tratar la Presidencia sueca a su incómodo socio de gobierno, los Demócratas Suecos, dijo que hasta ahora las cuestiones relativas a la agenda de la UE se decidían en la comisión de asuntos de la UE del Parlamento sueco.
Una fuente sueca explicó que, hasta ahora, a los Demócratas Suecos no les quedaba más remedio que aceptar su derrota en el Parlamento.
La fuente puso como ejemplo la votación sobre la ampliación de Schengen en el parlamento sueco, a la que el partido de extrema derecha se opuso firmemente. La votación tuvo éxito en la comisión parlamentaria a pesar de la oposición de los Demócratas Suecos, y Suecia votó finalmente a favor a nivel de la UE, sin desestabilizar al gobierno.
«Estamos aprendiendo con la práctica», dijo el interlocutor de alto nivel sobre el trabajo del nuevo gabinete sueco.
