La Comisión Europea presenta nuevas normas sobre el alquiler de corta duración

La Comisión Europea ha publicado un nuevo reglamento para racionalizar las operaciones de las plataformas de alquiler y las prácticas de intercambio de datos en el mercado único de la UE, dirigido a empresas como Booking.com, Airbnb y Expedia.

En los últimos años, el sector turístico de la UE ha experimentado un crecimiento espectacular en el uso de las plataformas de viajes en línea, que se calcula que ahora representan una cuarta parte de todas las reservas de alojamiento.

La regulación del alquiler a corto plazo se basará en la Ley de Servicios Digitales (DSA), una legislación horizontal recientemente adoptada que introdujo normas y responsabilidades para todos los operadores económicos en el ámbito digital.

La aplicación de la normativa estará en manos de las mismas autoridades encargadas de la DSA, los Coordinadores de Servicios Digitales.

Falta de transparencia

Para la Comisión, el auge de la popularidad de los alquileres de corta duración (RTC) en las ciudades de la UE ha dado lugar a una serie de problemas, sobre todo por la “falta de información fiable […] como la identidad del anfitrión, el lugar donde se ofrecen esos servicios y su duración, lo que dificulta a las autoridades la evaluación del impacto [of STRs],” dice la propuesta.

Sin embargo, los esfuerzos de las autoridades públicas para solicitar datos a los anfitriones “han sido fragmentados, gravosos y a menudo ineficaces”, según un alto funcionario de la UE. Estos esfuerzos solían estar destinados a adquirir información para hacer cumplir las normas existentes.

Por otra parte, el intercambio de datos por parte de la plataforma se vio limitado en su mayor parte por restricciones técnicas y normativas, en particular en cuanto a los datos personales que podían compartirse de acuerdo con el Reglamento General de Protección de Datos de la UE.

Por lo tanto, la propuesta legislativa tiene como objetivo introducir un marco armonizado para el intercambio de información relacionada con el mercado de alquiler a corto plazo, introduciendo obligaciones para los anfitriones, las plataformas y las autoridades locales.

El proyecto de reglamento de la UE tiene como objetivo mejorar la transparencia, mientras que los países de la UE mantendrán el control total sobre la regulación del sector del alquiler a corto plazo, incluyendo las normas de salud y seguridad, la política de vivienda, la seguridad y las cuestiones fiscales.

Procedimiento de registro

El reglamento pretende establecer un enfoque común para los procedimientos de registro, a partir del cual se concedería un número de registro único a los anfitriones y alojamientos para garantizar una mayor transparencia y trazabilidad.

En particular, los Estados miembros no obtendrán datos de la plataforma si no han establecido un sistema de registro para los anfitriones. Los esquemas existentes podrían continuar y se podría pedir información adicional, a condición de que sea proporcionada y necesaria.

El registro se realizaría a través de un sitio web central, que proporcionaría un número de registro único. Este identificador único es necesario porque la exactitud de los datos de los alquileres está actualmente en entredicho debido a la multiplicidad de listas, es decir, al hecho de que el mismo apartamento suele estar disponible en varias plataformas al mismo tiempo.

Los anfitriones estarían obligados a proporcionar información regularmente, incluyendo la dirección del alojamiento listado, el tipo y el tamaño de la unidad, así como los nombres de los anfitriones, los detalles de contacto y el número de registro comercial, en caso de que un anfitrión sea una empresa.

Las autoridades pueden verificar la información proporcionada en cualquier momento y requerir información actualizada de los anfitriones si lo consideran necesario. Cuando los anfitriones no actualicen su información, las autoridades nacionales podrían suspender su número de registro y pedir a las plataformas en línea que eliminen las unidades asociadas.

Cualquier suspensión o exclusión de la lista debe ser motivada por las autoridades competentes, mientras que los anfitriones tendrían derecho a recurrir la decisión.

La nueva legislación también exigirá a las plataformas online que se aseguren de que existe un número de registro válido antes de que una unidad pueda entrar en funcionamiento y estar abierta al alquiler. La interfaz de la página web deberá ajustarse para que el número de registro sea claramente visible.

También se espera que las plataformas online “hagan esfuerzos razonables para comprobar aleatoriamente la declaración” de sus anfitriones, siguiendo un enfoque similar al de la DSA.

Intercambio de datos

A su vez, las plataformas tecnológicas como Airbnb y Booking tendrían que transmitir automáticamente los datos a una ventanilla única nacional cada mes. Se introdujo una obligación más laxa para las microplataformas, aquellas con menos de 2.500 anfitriones activos en el trimestre anterior, para las que la transmisión de datos sería trimestral.

La nueva pasarela digital permitirá a las plataformas compartir la información de las unidades de forma automática, facilitando al mismo tiempo los controles por parte de las plataformas y evitando los alquileres ilícitos. Los Estados miembros tendrían que mantener unventanilla única de información a través de un sitio web nacional.

Además, los datos podrían compartirse de forma agregada -y, por tanto, anonimizada- con los responsables políticos, las autoridades administrativas y los investigadores, con el fin de sentar las bases de un futuro espacio europeo de datos para el turismo.